Una proteína es una molécula orgánica que realiza la mayor parte de los procesos (de todo tipo estructurales, de transporte, inmunitarios, metabólicos, …). Estas están formadas por cadenas de aminoácidos.
Yu Zong Chen, profesor del departamento de farmacia de la Universidad Nacional de Singapur y Peng Zhang, han llevado la innovación al siguiente nivel, creando melodías basadas en la estructura de las proteínas. Su investigación se publica en Heliyon.
Convertir la estructura de las proteínas en música parece complicado, pero si observamos como se construyen y cómo se hace la música, ambas tienen similitudes.
Las cadenas de proteínas se pliegan y ondulan para apoyar su función. “La cuerda de música es con ondas de sonido de tonos más altos y más bajos, tempos y repeticiones. Con algoritmos se puede mapear la cadena de características químicas y estructurales de aminoácidos en una cadena de características musicales.”
En este estudio Chen y sus compañeros se centraron en la música clásica, porque generalmente presenta melodías más ligeras, homofónicas, elegantes y emotivas, estas características sirven como guía aplicable para el mapeo de proteína a música.
Para este experimento se eligieron 18 proteínas pertenecientes a dos grupos. Las primeras 11 eran proteínas que tenían funciones involucradas en la emoción, la cognición, la sensación y la interpretación. Las restantes tenían diversas funciones como la fotosíntesis, fluorescencia, alimentarias y de diferentes enfermedades.
La música producida era compleja, con variaciones notables en el tono y ritmo. Y al no haber dos piezas iguales debido a la cadena de aminoácidos, cada proteína producía una melodía distinta.
Fuentes: News Courier