Los paleontólogos han encontrado fósiles de dinosaurios con osteoartritis, fracturas, tricomonosis e incluso con un cáncer mortal, pero nunca antes habían descubierto uno con un resfriado. Los restos de un diplodócido, un gigante de cuello largo similar a un brontosaurio, pueden suponer la primera evidencia de una infección respiratoria en estos animales ya extintos. Es probable que "Dolly" sufriera tos, secreción nasal, dificultad para respirar, fiebre y pérdida de peso; e incluso que muriera por algo similar a una gripe fuerte. Todo ello publicado en la revista Scientific Reports.
Los fósiles de "Dolly" fueron descubiertos en el suroeste de Montana y datan del Período Jurásico Tardío ,es decir, aproximadamente 150 millones de años.
Los investigadores de Dinosaurios de las Grandes Llanuras en Malta (Massachusetts) examinaron tres de las vértebras cervicales del animal e identificaron en su sistema respiratorio unas protuberancias (elevaciones) óseas anormales nunca antes vistas que tenían una forma y textura inusuales.
La tomografía computarizada reveló que estaban hechas de hueso anormal que muy probablemente se formó en respuesta a una infección, que finalmente se propagó a las vértebras del cuello a través de los alvéolos y provocó los crecimientos óseos irregulares.
Los autores de todo ello especularon que esta infección respiratoria podría haber sido causada por una infección fúngica similar a la aspergilosis , una enfermedad respiratoria común que afecta a aves y reptiles en la actualidad y que puede provocar infecciones óseas.
En ese caso, probablemente experimentó síntomas similares a la de la gripe o la neumonía, como la pérdida de peso, tos, fiebre y dificultad para respirar.
Dado que la aspergilosis puede ser mortal en las aves si no se trata, incluso podría haber causado la muerte del dinosaurio.
Hablando sobre los síntomas que pudo sufrir "Dolly" , al sostener estos
huesos infectados en tus manos, no puedes evitar sentir lástima, dijo Cary
Woodruff, responsable de todo este estudio. Todos hemos experimentado estos
mismos síntomas y este dinosaurio de 150 millones de años probablemente se
sintió tan miserable como todos nosotros cuando estamos enfermos, volvió a
especular la encargada.
Para el investigador, la infección de "Dolly", no solo nos ayuda a rastrear la historia evolutiva de las enfermedades relacionadas con las vías respiratorias en el tiempo, sino que nos brinda una mejor compresión de a qué tipo de enfermedades eran susceptibles los dinosaurios.
Fuentes: ABC, Vozpópuli, National Geographic.